España tiene muchos más problemas de los que dice la televisión. Esta se centra en la actualidad política y poco más, y es cierto que, en ese plano y en todo lo que le rodea (la inflación, la inestabilidad, la sanidad o la educación) existen muchos problemas que requieren de soluciones urgentes. Sin embargo, nosotros queremos dirigir nuestro discurso hacia otro tipo de problemas que existen en España y que, desde luego, están ocasionando muchos malos momentos para las personas que conforman nuestra sociedad o, al menos, una parte de esa población. Hablamos de los diferentes tipos de adicciones que se registran día a día en nuestro país.
Y es que tenemos muchos problemas en este sentido… quizá muchos más de los que podamos llegar a pensar. Las adiciones forman parte de la vida de miles y miles de personas de nacionalidad española. Y todas son peligrosas. Una de las que más peligro conlleva es la adición a las drogas, especialmente a la cocaína, que conlleva un riesgo que puede ser extremo para la persona que la consume. Además, la adición al juego es otro de los grandes peligros en la vida de una persona. Y es que nos puede conducir de una manera directa e inexorable a la ruina.
Hay datos que nos deben hacer reflexionar seriamente sobre todo lo que está sucediendo en materia de adiciones en el interior de nuestras fronteras y, a continuación, vamos a analizar alguno de ellos:
- Según una noticia publicada en la página web del Diario de Sevilla en el pasado mes de junio, España lidera el ránking europeo en lo que respecta al consumo de cocaína. Es, sin duda, una de las peores noticias de las que nos podríamos enterar. Y es que es evidente que el riesgo que padece nuestra sociedad, su juventud y su madurez, como consecuencia de esto es increíble.
- En otra noticia, en este caso publicada en la página web El Cierre Digital, se informaba de que España es también el primer país de Europa que tiene a más jóvenes adictos al juego. El problema crece cuando se considera que son los barrios más pobres de las ciudades (como Usera, Villaverde o Carabanchel en el caso de Madrid) donde se produce una mayor problemática con este tipo de cuestiones. Por eso existe una polémica tan amplia con todo lo que tiene que ver con las casas de apuestas en nuestro país.
Los problemas relativos a las adiciones son más comunes de lo que pensamos y, en España, debemos tener un especial cuidado con este tema teniendo en consideración que asuntos como la cocaína o la ludopatía afectan a una gran cantidad de personas a lo largo y ancho del territorio. Los profesionales de Sinopsis Centro nos han indicado que los últimos años han sido especialmente dramáticos en España y que hacen falta mayores campañas de concienciación por parte de las instituciones públicas para evitar que los datos sigan mostrando el peligro de las adiciones en nuestro país.
¿Qué hacemos con las casas de apuestas?
Vamos a centrarnos ahora en lo que respecta a los problemas derivados de la ludopatía. Estamos observando, con mucha preocupación, cómo las casas de apuestas proliferan en los lugares más pobres de nuestros pueblos y ciudades y cómo, además, su publicidad se extiende en las camisetas de los equipos deportivos que son animados por miles de personas. Eso es un problema porque espacios como estos tienen una enorme visibilidad. Y, claro, no hay que decir que eso tiene una influencia terrible en la gente, que cree los mensajes que se les aportan en las campañas de publicidad emitidas por esas empresas.
Es cierto que el Gobierno ha puesto límite a alguno de los asuntos derivados de la actividad habitual de las casas de apuestas y su publicidad, pero… ¿realmente es suficiente? Nosotros pensamos que no. Debemos ser muy críticos con este tema y valorar el grado de daño que genera este tipo de negocios, especialmente en las personas que ya son vulnerables de por sí. Ojalá que la Ley se endurezca todavía más. Es lo justo, lo que procede y lo único que puede generar algo de tranquilidad.
Ni que decir tiene que la cocaína y las demás adiciones también deben ser limitadas de una manera contundente. Ojalá que así sea, pero para garantizarlo debemos tener siempre en cuenta que la herramienta necesaria es la concienciación. Si conseguimos dominarla y somos capaces de hacer que nuestro mensaje cale en la sociedad, tendremos mucho ganado para intentar que las adiciones estén mucho más controladas entre las personas que forman parte de nuestra sociedad. Es un objetivo muy importante y que nunca tenemos que perder de vista. La salud física y emocional de muchas personas depende de eso.